Por Marcela Ruiz, presidenta de la FAM
Uno de nuestros ejes fundamentales al momento de asumir la conducción de la Federación Argentina de la Magistratura fue profundizar las políticas de género en los poderes judiciales y en las asociaciones y colegios de la magistratura y la función judicial de todo el país.
Entre las variadas acciones que comenzamos a implementar debo destacar que por primera vez en nuestra historia creamos la Dirección de Políticas de Género, Igualdad y Diversidad ya que comprendemos la complejidad de la problemática que enfrentamos.
Somos conscientes de que necesitamos un abordaje integral que garantice una verdadera Perspectiva de Género y Derechos Humanos para nuestras propias vidas y libertades como mujeres e identidades diversas en el seno de los ámbitos judiciales, y también a la hora de impartir justicia, de intervenir en los conflictos que día a día llegan a nuestros espacios de trabajo.
Al tiempo de iniciar la gestión creamos la Comisión de Género de la FAM de la que participan mujeres referentes de las comisiones de género de los colegios y asociaciones. Este espacio es el ámbito propicio para intercambiar experiencias, saberes, objetivos comunes y desafíos relacionados con las temáticas de género y disidencias. Sabemos que nadie se salva sola o solo. Sabemos que las construcciones y los cambios son colectivos.
Este mes de la mujer volvemos a ratificar que en la Federación Argentina de la Magistratura, o sea, en la justicia de cada jurisdicción, a lo largo y a lo ancho de la Argentina trabajamos por:
- Una sociedad libre de violencias,
- Una sociedad más igualitaria,
- Una sociedad en la que las mujeres e identidades feminizadas seamos respetadas,
- Una Justicia más inclusiva,
- La paridad de género en todos los ámbitos,
- La ampliación de las leyes de cupo,
- Una Corte Suprema integrada por mujeres,
- La erradicación de estereotipos de género,
- La capacitación en perspectiva de género dentro y fuera del poder judicial,
- La creación de Observatorios con perspectiva de género en todo el país,
- Un mayor reconocimiento a la mujer trabajadora
- La erradicación del abuso, acoso y violencia hacia las mujeres dentro del poder judicial
- Un mundo digital inclusivo,
- El cambio tecnológico y la educación para alcanzar la igualdad de género y el empoderamiento de todas las mujeres
- La erradicación de prácticas machistas,
- Una vida segura y libre de violencias para las mujeres y las diversidades,
- Concientizar y trabajar para la modificación de la vida cotidiana y que las tareas de cuidado y domésticas sean asumidas en forma conjunta por varones y mujeres,
- Utilizar lenguaje que no reproduzca situaciones discriminatorias o machistas
- La eliminación de los estereotipos de género,
- Un sistema de justicia igualitario,
- Eliminar la discriminación entre hombres y mujeres en todos los órdenes de la vida.
Por más justicia para todas y todos.
