Por Christian José Fabio, Fiscal U.F.I. y J. Nro. 4 de Escobar, Pcia de Buenos Aires
A partir de la pandemia se ha profundizado la utilización de algunas herramientas que con anterioridad a ello veníamos sosteniendo como manera más efectiva para la relación con las víctimas, a los fines de garantizar el acceso a la justicia. Los elementos tecnológicos más sencillos (celulares, correos electrónicos) han sido indispensables y lo es actualmente para mantener un vínculo permanente con los justiciables.
Otra de las herramientas con las cuales contamos, es la relación entre el Ministerio Público Fiscal y los referentes barriales, quienes de manera articulada trabajamos para garantizar también el acceso de aquellas víctimas más vulnerables al sistema judicial.
Las mayores dificultades que se presentan a mi modo de ver, es la falta, en algunos casos, de políticas públicas que permitan a las víctimas tener de alguna manera el acceso a la información a través de un recursero donde se facilitaría de alguna manera el acceso a la justicia. Y en este punto consideramos fundamental el mantenimiento y la permanencia de las distintas mesas intersectoriales de los municipios.
Con relación a la implementación del dispositivo de la justicia en los barrios, se logra de manera muy sencilla teniendo aceitada fundamentalmente la relación entre la Fiscalía y el referente barrial. ¿Y cómo se logra ello? Se logra precisamente, con la participación de todos los actores en la ya referida mesa intersectorial contra las violencias.
Los resultados son muy alentadores, toda vez que estadísticamente hemos comprobado que se ha receptado mayor cantidad de casos donde con anterioridad a la implementación de este sistema nunca se hubiera judicializado. Lo importante de ello es lograr mantener en el tiempo la implementación de éste dispositivo y de alguna manera ir incorporando mayor cantidad de recursos.
Para concluir considero fundamental la participación activa de todos los actores de la ruta crítica en los casos de violencia en la mesa intersectorial contra las violencias establecidas en los municipios que de alguna manera viene a fortalecer la relación entre la justicia, fuerzas de seguridad, escuelas, organismos de salud, ONG, etc.
Seguramente, con los dispositivos que en la actualidad contamos aún no alcanza para garantizar al cien porciento el acceso a la justicia de aquellas víctima más vulnerables, pero fundamentalmente con el compromiso de aquellos recursos humanos que hoy contamos más el acompañamiento de políticas públicas para erradicar de alguna manera este flagelo creemos que estamos yendo por buen camino.
